Si aún no ha asegurado su automóvil, conviene que lo haga lo más rápido posible. Esta es una decisión que no se debe aplazar. Al comprar un automóvil, lo primero que debe hacerse es asegurarlo. Existen varias razones para ello. La primera, es que nuestro automóvil es una inversión que nos ha costado una buena parte de nuestro capital.

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En caso de que suceda algún incidente, podríamos recuperar parte de esa inversión. Esta sería una razón suficiente para ponerlo a buen resguardo por parte de una empresa encargada en seguros de automóvil. Sin embargo existen muchas más. Al usar nuestro automóvil estamos, de una u otra forma, exponiéndolo a todo tipo de accidentes que podrían suceder. Un choque con otro automóvil, un accidente con un peatón, una falla mecánica, etc.

No hay que ser fatalistas, claro, pero si calculamos las posibilidades de que suceda, por ejemplo, mientras nos movemos por una Free Way a alta velocidad, y si a esto le sumamos los factores climáticos como la lluvia o la nieve, estas probabilidades se incrementan.

Incidencia de accidentes de tráfico en Estados Unidos

Según informe de la aseguradora Allianz*, Estados Unidos ocupa el tercer puesto, tras la India y China, en incidencia mundial de accidentes de automóvil. Cerca de un 6.7% de las muertes del total conmutadas entre 2014 y 2015 en los Estados Unidos, se deben a accidentes de tráfico. Esto hace que conducir sea una actividad que implica cierto riesgo. Aunque muchas personas en su vida, jamás experimentan un accidente, el riesgo es alto y conviene tomar medidas al respecto. Una de estas es asegurar el automóvil. Las características geográficas de los Estados Unidos, unido a su amplia red de carreteras, por las que circulan millones de autos por día, hace que moverse por sus vías tenga algún riesgo. Por esta razón asegurar el automóvil es una decisión que conviene tomarla.

Estados Unidos y su alto nivel de accidentes de automóvil

Del mismo modo, el alto índice de compras de automóviles en este país, hace que se multipliquen las posibilidades de experimentar un choque simple por lo menos. Además casi todas las leyes en el mundo exigen que el propietario asegure su automóvil, dados los riesgos que implica el conducir. Como se ha dicho anteriormente, en caso de un accidente, el propietario puede tener la certeza de que tendrá un respaldo en materia monetaria y legal ante la ley. Por esta razón, asegurar nuestro automóvil es una responsabilidad que debemos asumir para evitar inconvenientes con la ley.